Gran Villa

La Iglesia de Aenor

El edificio más importante y elevado de la ciudad, construido con enormes sillares de piedra marmórea blanca. Posee, al oeste, un gran torreón que permite organizar el dominio de la ciudad y la observación de esta y de sus cercanías. Los caballeros de la Orden de Aenor tienen aquí su sede y es importante señalar que desde hace siglos se adora a un gigantesco árbol de tronco rojizo que, dicen, fue plantado por Aenor y los suyos en eras pasadas.

Embarcadero

Este embarcadero es el mayor de todas las tierras fluviales del Valle, posee una gran tradición y son muchos los marineros que llegan desde el mar a este lugar para descargar sus mercancías y adquirir nuevos productos.

El Mercado Norte

Situado al norte de la ciudad, en la zona pudiente, este lugar es un lugar de paso obligatorio para todo aquel que tenga ganas de adquirir artículos de todo tipo y que posea, además, una bolsa llena de monedas.

El Ayuntamiento

Sede del gobierno oligárquico de la ciudad, en este lugar vive El Gran Patricio de la Gran Villa (su jefe electo por los grandes comerciantes de la ciudad) y es aquí donde se realizan todas las acciones de gobierno y donde se reúne la comuna ciudadana (asamblea de los principales comerciantes).

Posada el Gigante

Uno de los locales más lujosos de toda la ciudad, tiene fama de tener en su interior a los mejores artistas, la mejor comida y, por supuesto, bebida pero, obviamente, es también el más caro de todos.

Barrio comercial

Situado al norte del río, en este conjunto de barrios se encuentran las calles mas prósperas y los palacios de la ciudad. Aquí habitan los grandes comerciantes, los ricos artesanos y es un lugar dominado por la seguridad, buenas guardias contra los ladrones y los incendios.

Posada el Fuego del Hogar

Situada a las afueras de la ciudad esta humilde posada deja mucho que desear en cuanto a su calidad y salubridad pero tiene precios asequibles para cualquiera y la música, si no hay una pelea, no es nada despreciable.

Los arrabales

Situados al sur del río, estos barrios están dominados por chozas de pésima calidad o edificaciones que rozan el estado de ruina. Aquí viven los "vagos y maleantes" de la ciudad y nadie de buen juicio u honradez entre por propia voluntad en esta zona.