Baisus, el Terror del Norte

Cuentan en las posadas, mercados y tabernas que en el norte del Valle, en los lindes del Bosque Sangriento y sobre las tierras de la Villa Martel, se ha alzado de nuevo un antiguo y ancestral dragón que ha comenzado a arrasarlo todo a su paso con el fuego de sus poderosas fauces.

Ganado, mujeres y campos son devorados por este salvaje animal o son presa de sus garras o pasto de sus llamas. Es conocido como Baisus y dicen que su tamaño es colosal, siendo capaz de volar y que su piel, además, esta recubierta por unas escamas mas duras que el mismísimo acero. También cuentan que su fuego viene del mismísimo inframundo pues es capaz de derretir cualquier cosa, desde el acero a la mismísima roca de las montañas.

Muchos nobles caballeros han intentado ir en su busca para matarlo pero dicen que anida en el Bosque Sangriento y nadie a vuelto para contarlo. Muchos en la costa y en el sur creen que esto es solo un cuento para niños, una historia inventada para quitarle importancia a la muerte del señor de esas tierras (del Fuerte de la Sangre) pero nadie desearía que esa criatura bajara al sur... Exista o no.

El gran dragón Baisus cobra cada vez mayor fama y ya son muchos los que admiten que no es un cuento de viejas sino una realidad. Ya han sido muchas las aldeas que han ardido por culpa de los infernales fuegos de las fauces del dragón y son ya varios los castillos que han sido hundidos hasta sus cimientos por la fuerza destructora de esta gran bestia.

Cuentan que tiene su refugio en el Bosque Sangriento y, aunque ya varios caballeros han marchado para darle muerte, ninguno ha vuelto para contarlo. La situación es muy crítica porque, al mismo tiempo, el señor de Fuerte de Sangre murió, según cuentan, por su elevada edad y ya no hay un señor que domine unanimidad esas tierras. Varios señores, tres para ser mas exactos, reclaman el título y muchos otros actúan siguiendo sus propios intereses, sin temor alguno a incumplir la ley y creando una situación de continuo conflicto que roza con la anarquía.

Solo un señor, Einarr Hensir ha jurado matar a la bestia con una espada que, según cuentan, es mágica (para más información acudan a Personajes Ilustres, en fichas). El resto, a día de hoy, permanecen en silencio pero lo cierto es que la guerra, unida a la desolación causada por el dragón, están dejando un páramo yerno en todo el norte.

Los movimientos del dragón son inciertos pero cuentan que en las últimas semanas se ha ido alejando más y mas de los lindes del bosque en sus ataques y que, poco a poco, se acerca a Villa Martel (lugar donde murió el último dragón, según cuentan las leyendas).