Los bárbaros

Los bárbaros

Este es el nombre que reciben aquellos que habitan en los territorios no iluminados por la fe de Aenor y generalmente suelen ser aquellas tierras que se encuentran cubiertas por enormes extensiones de bosques o por inalcanzables montañas. La religión que suelen tomar estas gentes suele ser conocida como Paganismo, descrita con detalle en el apartado de religión, y la organización de estos pueblos gira en torno a las asociaciones tribales. También hablan una lengua diferente (el Meroving) y poseen su propia escritura a base de runas.

Hay cientos o miles de tribus y sería imposible contarlas todas, no siempre están en paz entre ellas y muchas veces se podría decir que pelean mas entre ellos que contra los "civilizados" pero cuando surge un líder capaz de unir a un buen número de tribus las tierras del norte no pueden evitar temblar de pánico...


Se podría decir que estas gentes viven por y para la guerra pero no es así, realmente se lanzan al combate por dos motivos: el primero, y fundamental, es que sus tierras no suelen tener suelos muy ricos y el clima es muy duro por lo que en muchas ocasiones deben marchar a otras tierras para obtener los recursos que necesiten para su supervivencia y la segunda razón, en relación con la primera, se debe a que su ley, muy unida a la religión, les dictamina que todo poder que aspiren a tener deben obtenerlo mediante el combate.

Estas gentes cuentan con expertos exploradores, curanderos y conocedores de la naturaleza, también son expertos navegantes (algunos dicen que los mejores) y no dudan en aprovechar todas las riquezas del mar (tanto en el saqueo como en la pesca).

No suelen llevar armas ni equipos muy pesados, más bien al contrario, pues al vivir en tierras boscosas y montañosas suelen optar por armaduras ligeras que les permitan moverse con relativa facilidad y también, como buenos navegantes, eviten las armaduras pesadas para no hundirse en lo más profundo del mar si sus navíos naufragan.


Poseen, aunque sea sorprendente, castillos y una ciudad aunque la mayoría de sus poblamientos están construidos con madera. Su única ciudad es Thardreïm, con un castillo de piedra pero con el resto de sus edificaciones realizadas con madera, y es un lugar en el que residen las tribus más importantes. El líder o señor de esta ciudad es elegido por votación entre los jefes de las tribus más poderosas pero aunque alguien domine esta ciudad no implica que gobierne sobre todas las demás tribus, ni mucho menos.

Hay dos fortalezas más y estas tienen un sistema parecido por lo que resulta muy difícil que una misma tribu domine los tres castillos a la vez aunque ha ocurrido en más de una ocasión, tras una cruenta guerra por supuesto, y estos dos castillos restantes son muy importantes pues permiten el acceso a la península dominada por los bárbaros.

Estas fortalezas son: Paso Escabroso, la más norteña, y Paso de los Lamentos, algo más al sur.

Un lugar sagrado para estas gentes, y que carece de nombre, se encuentra al norte de sus territorios. Este lugar sagrado no es más que un antiguo asentamiento, hoy día en ruinas, en el que se dice que las tribus derrotaron a un ancestral y poderoso enemigo. Las ruinas de lugar hoy sirven de cobijo para las tribus cuando marchan a este sitio sagrado, en el que no se puede luchar, para comerciar, compartir experiencias, etc. Los grandes concilios de estos pueblos también son realizados allí.


También hay bárbaros dispersos por las cordilleras de las Montañas de Aenor, suelen ser ignorados pero en algunas ocasiones avanzan hasta el Valle. Suelen poseer una lengua y una cultura muy similar que la de sus primos del sur por lo que las relaciones entre estos pueblos es muy buena y su organización muy similar aunque estos carecen de fortalezas y de grandes asentamientos.